Comitán.- Por más de 40 minutos, la periferia de Comitán se convirtió ayer en zona de “guerra” tras registrarse una persecución para rescatar a un niño secuestrado por cuatro encapuchados fuertemente armados que lo “sacaron” del interior de su domicilio ubicado en la cabecera municipal de Las Margaritas.
Las acciones iniciaron sobre la carretera Comitán-Altamirano, con dirección al sur de la ciudad, luego de que el padre de Alejandro Guillén Moreno de 12 años de edad, los persiguiera por la carretera Las Margaritas-Comitán.
Cerca de las 12:00 horas de este martes el margariteño Ángel Alejandro Guillén León, a bordo de su camioneta comenzó a perseguir a los secuestradores de su hijo, persecución que concluyó para él, sobre el libramiento norte, después de pegarles dos encontronazos, porque los sujetos bajaron y lo encararon para amenazarlo.
Lo encañonaron y le advirtieron “deja de perseguirnos o matamos a tu hijo”. “Llévenme a mí, suelten a mi hijo” exclamó el empresario desesperado.
Policías Estatales Preventivos (PEP), Policías Federales (PF), continuaron el operativo para rescatar con vida al niño secuestrado, mientras que su madre Rosa Guadalupe Moreno y sus dos hermanos David y René de 2 y 4 años de edad, fueron abandonados por los secuestradores amarrados de pies y manos con cinta industrial al interior de su domicilio en Margaritas.
Hasta las 13:00 horas, decenas de Policías Estatales, Policías Federales, Policías Municipales, Agentes de Tránsito y Vialidad, mantenían cercada la ruta que siguieron los secuestradores a bordo de una camioneta color verde, tipo Blazer y placas de circulación DRB-5136.
A la altura de la colonia 1º de Mayo los sicarios atravesaron y descendieron de la camioneta para disparar a la patrulla número 12502 de la Policía Federal, intentaron asesinar a los policías para huir en medio del fuego cruzado.
Los encapuchados continuaron la fuga con dirección al basurero municipal un camino de terracería que se comunica con otras comunidades, ahí pretendían perder a los efectivos federales, estatales y municipales.
El camino que conduce a la comunidad Las Delicias, se encontraba franqueado por municipales y Policía Estatal Fronteriza, dispuestos a disparar para evitar que lograran su objetivo, el secuestro de Alejandro.
Liberan y rescatan al niño sano y salvo
Los secuestradores a bordo de la Blazer, ingresaron a un camino sin salida; hasta ese lugar llego la patrulla PP-369 que para ese momento ya encontró al niño abandonado y libre, ahí comenzó el segundo enfrentamiento a balazos al parecer R-15 cuernos de chivo.
Los cuatro secuestradores lograron huir dejaron abandonado en el camino cuatro pasamontañas, cuatro rollos de cinta industrial, la camioneta cerrada y al menor con la cantidad de 200 pesos que le serviría al menor para “el taxi de regreso”, le comentaron.
Sin embargo la confrontación se registró a un costado del basurero donde se utilizaron armas que pusieron en riesgo la vida de los efectivos y del menor, en el lugar quedaron casquillos percutidos.
Alejandro se refugia con su padre
En hombros cargaron, Policías Federales a Alejandro Guillén, quien mencionó que si tuvo miedo pero que sus plagiarios no lo lastimaron, fueron horas de angustia pero por fin logró ver a su padre que con un grito de júbilo agradeció a Dios, volver a tener entre sus brazos a su hijo.
Nervioso, titubeaba Ángel, no creía que su hijo estuviera sano y salvo, en sus brazos después de observar como sujetos encapuchados tenían en su manos la vida de Alejandro, tan indefenso e inocente.
Alejandro no recordaba bien el rostro de sus captores, pero si sintió que fueron cuadras y avenidas tan largas las que recorrió a lado de cuatro hombres armados, al interior de una camioneta con vidrios polarizados.
Su padre jubiloso y agradecido con todas las corporaciones policiacas por la coordinación y el buen trabajo que desempeñaron, considero y tomo en cuenta el valor de los elementos estatales y federal que bien pudieron perder la vida en el fuego cruzado contra los secuestradores.
A pesar de que por momentos creía que podría perder de vista la camioneta en la que llevaban secuestrado a su hijo no perdió la fe de que el niño no tendría porque pagar ningún encargo, no tendría porque pagar ninguna venganza, no tendría porque pagar ninguna tortura.
Así fue como durante dos horas las corporaciones policiacas se movilizaron por toda la ciudad para cerrar caminos, cercar avenidas, tapar calles, barrios, colonias peligrando su vida por la vida de un niño, “Alejandro”.
Mientras que el niño se reencontraba con su padre a quien también le preocupaba su esposa por que al parecer la crisis nerviosa le provocó un shock, Policías Estatales y Municipales no cesaban la búsqueda, peinaron la zona, porque sabían que uno de los sicarios se encontraba herido.
Después de varias horas lograron la detención de uno de ellos a quien le cubrieron todo el cuerpo para evitar que su identidad fuera revelada, además para no entorpecer las investigaciones que la Fiscalía Distrital, inició con la apertura de la Averiguación Previa correspondiente.
Helicópteros, moto patrullas, patrullas trasladaron al detenido a la base de operaciones de la PEP, para iniciar cateos en domicilios utilizados como casas de seguridad en Las Margaritas y Comitán por esta banda de secuestradores.